Manchas de Carmín

Manchas de Carmín

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martes, 29 de diciembre de 2015

2015

Enero. Madrid. Escribir. La línea interna de Whatsapp. Las putas relaciones a distancia. El skype. Febrero. Pamplona. La lluvia. Perder el partido. Los trabajos timos no remunerados. Máster de Diseño Web. Reescribir, reescribir, reescribir. El Psicólogo. Marzo. La falta de inspiración. La felicidad.  Abril. Javicracia. "Vamos a vivir un mes juntos". Un buen cumpleaños. La cama sin hacer y los platos sin fregar. Las entrevistas de mierda. Volver a leer. Volver a escribir. Mayo. La rabia. La gente que de verdad importa. La convivencia. Los putos amigos. Los nuevos amigos. "Me encantáis". Junio. Ferias. Coronas de flores. Nuestra primera foto. La piscina. "Vas a ser tía". Las cenas de despedida y las malas resacas. Fin de máster. Casi nos volvemos a encontrar, Salamanca. Julio. Ortigueira. Jugar al UNO. El cine. El agobio de Whatsapp. Agosto. Martes Mayor. Dos mujeres y un destino. Rebeca en Madrid. El arroz de Alba. Cervezas en Cáceres. "El de cuando todos me dijeron que volvería". Madrid, adiós. Septiembre. El regreso del hijo pródigo. La caída del héroe. Plasencia. Maratón de Lost. Octubre. Gimnasio. La dieta que no es dieta. Ver El Padrino por primera vez. Releer Harry Potter. El tiempo libre. El puto paro. Noviembre. La desidia. "Nos gustas mucho pero cogemos a otra". La friendzone laboral. Los amigos que te obligan a salir de casa. Diciembre. Valladolid. Plasencia otra vez. Desayunar churros el día del sorteo. "El día que escribas un libro preséntalo al Premio Planeta". Las cañas de Navidad. El amigo invisible. Bocadillo de María. "Eres tan guapa como Yoda y tan lista como Jar Jar". Gracias.

Feliz 2016

domingo, 25 de octubre de 2015

sábado, 10 de octubre de 2015

#4

Encontrar el amor es como volver a casa a las 5 de la mañana.

Pasas un poco de miedo y frío en el camino, pero se te pasa en cuanto cierras la puerta y te pones el pijama.

viernes, 29 de mayo de 2015

Todas las historias que dejé a medias

Al menos cuando duermes no tienes problemas. 
No hay demonios salvo tu propio cerebro.
No hay demonios salvo sus ojos. 

Pero cuando despiertas sólo están los poemas inútiles que a veces hacen que te sientas mejor.

Welcome to my party.

viernes, 2 de enero de 2015

En tiempos de cólera.

Imagina que no discutimos.

Imagina que la inseguridad no nos come y que después no nos comemos a besos hasta echarla de la habitación.
Imagina que los demás ganaran y nosotros nos perdiéramos.

Imagina una llamada perdida,
después de trescientas que duraron hora y media.

Imagina que no digo nada y que tú hablas mucho.
Imagina que la tercera cerveza no me hiciera ni puta gracia.
Ni la cuarta, ni la quinta.
Ni siquiera la primera.

Cierra los ojos.
Imagina esa puta mierda.

¿Lo tienes?

Imagina dos besos en lugar de uno.
Un saludo formal.

¿Dónde está mi abrazo?
y mi beso
y mi zancadilla al andar

Sí...lo veo.
¿Qué hacemos?
¿Lo guardamos o te lo restriego todos los días por la cara?

Con lo divertido que es eso, ¿eh?
Vaya risas, ya verás.

Ah sí, perdona.
Que qué hacemos.
No lo sé.
Por eso pregunto.